domingo, 15 de noviembre de 2009

Base de cheescake. Cuanto más simple, mejor.


Otra receta más de la base del cheescake (o una variante más de la masa quebrada). Es tan simple de hacer como de dibujar y, además, da para unas cuantas tartas..unas 15 más o menos, usando un molde de 22cm. Y como se puede congelar, se puede hacer de más sin problema.

Ingredientes:

500g mantequilla a temperatura ambiente
300g azúcar
7 yemas de huevo
1 puntita minúscula (de cuharita) de bicarbonato
1 pizca de sal
1kg de harina
la ralladura de 1/2 limón

1. Batir la mantequilla y el azúcar hasta hacer una crema (o fundir el azúcar) 2. Añadir las yemas y batir suavemente 3. Mezclar la harina, el bicarbonato (muy muy muy poco) y la pizca de sal y añadirlos también 4. Rallar la cáscara del limón con cuidado de no llegar a rallar la parte blanca (porque le daría un sabor amargo en vez de aroma a limón) 5. Unir todo bien y amasar brevemente 6. Formar una bola, envolverla en film transparente y dejarla reposar 1 hora en la nevera 7. Finalmente, extender la masa con un rodillo, dejándo un grosor de aproximadamente 5mm, no menos porque las bases se romperían con más facilidad una vez horneadas; e ir cortando las bases con la ayuda de un molde del tamaño que se desee.
Se puede congelar en porciones, bien envueltas en film.
Hornear a 180ºC, unos 10-15min. No deben quedar demasiado doradas, sino más bien blancas.
Y...si se rompe...a desayunar con café y galletas :)